La Leyenda de las Degolladas.

Con música de las cantigas 158, 151 y 150 de Alfonso X, el Sabio, y letra de J. M. Grande presentamos esta recreación virtual de una de las leyendas de la Valdavia: "El manantial de las degolladas".


Desde la ermita de la Virgen de Rabanillo se contempla el monte Bascarrión, también llamado Sahagún, por haber pertenecido a la abadía benedictina de dicho nombre. En sus inmediaciones existe un manantial llamado de "Las Degolladas". La tradición nos cuenta que allí existió un antiguo monasterio y que las monjas que lo habitaban fueron degolladas por los moros.

"Las Degolladas" fue nombre puesto seguramente a posteriori de algún acontecimiento sangriento en el lugar. Hay referencias documentales al Valle y Rabanillo en el s. XII, pero como iglesias o "monasterio propio" y parece raro no conocer ningún documento posterior con tal nombre. Se entiende monasterio propio como abundaban en la iglesia hispana, antes del rito latino. En definitiva no sería un monasterio como hoy entendemos, por muy pequeño que haya sido. No existe base para pensar que haya sido más que una ermita con casa aneja. Aunque la tradición cuenta que las monjas fueron degolladas por los "moros", esto sería imposible en esa época (Hacia 1172, fecha en que algunas fuentes suponen fundado el monasterio, los árabes estaban ya arrinconados al sur de España, más debajo de Toledo y nunca volvieron por esta comarca del norte). Podría haber sido un monasterio visigótico, destruido cuando la invasión de los árabes (no hay ninguna constancia documental) o un monasterio prebenedictino de tantos como se fundaron en el s. X (monasterios insignificantes y de muy pocos monjes), pero tampoco hay documentación alguna en los archivos de las órdenes religiosas de la época).

De investigar su veracidad histórica se ocupó durante bastante tiempo D. Faustiniano Gutiérrez, hijo del pueblo, realizando consultas y gestiones en numerosos archivos: Monasterio Cisterciense de Osera (Orense), Real Abadía de Samos, Monasterio de S. Pedro de Dueñas, Universidad Pontificia de Comillas... así como varias consultas a historiadores y personas relevantes.

De sus investigaciones se desprende que no ha existido monasterio alguno con ese nombre "Las Degolladas", puesto seguramente a posteriori de algún acontecimiento sangriento en el lugar. Hay referencias documentales al Valle y Rabanillo en el s. XII, pero como iglesias o "monasterio propio" y parece raro no conocer ningún documento posterior con tal nombre. Se entiende monasterio propio como abundaban en la iglesia hispana, antes del rito latino. En definitiva no sería un monasterio como hoy entendemos, por muy pequeño que haya sido. No existe base para pensar que haya sido más que una ermita con casa aneja. Aunque la tradición cuenta que las monjas fueron degolladas por los "moros", esto sería imposible en esa época (Hacia 1172, fecha en que algunas fuentes suponen fundado el monasterio, los árabes estaban ya arrinconados al sur de España, más debajo de Toledo y nunca volvieron por esta comarca del norte). Podría haber sido un monasterio visigótico, destruido cuando la invasión de los árabes (no hay ninguna constancia documental) o un monasterio prebenedictino de tantos como se fundaron en el s. X (monasterios insignificantes y de muy pocos monjes), pero tampoco hay documentación alguna en los archivos de las órdenes religiosas de la época). En la Historia de Sahagún se lee "En la Valdavia, en el alfoz de Saldaña, hubo otro monasterio llamado Santa María de Kavarrosa, que pudo ser bien antiguo; porque en el año 1093 ya era de los unidos a Nogal, que don Alfonso VI ya unió con él a Sahagún, quien tiene aún algunas haciendas en el término de dicho monasterio", pero no está claro si puede referirse a "Las Degolladas".

A propósito de la zona en que se encuentra, según la leyenda, tenemos una referencia en el 
Archivo histórico Nacional (Sahagún. Carpeta 897, número 19. Copia facsímil del s. XIII, con signo real mal puesto) encontramos estas reseña: "Alfonso VII da al monasterio de Sahagún Valderrabanillo por entero con los términos comprendidos o limitados por la carrera de Pascual que viene de Laguna Herrera y va a la carrera que va de Tabanera a Carrión, y vuelve hasta la carrera de Tabanera que se llama de Tras Otero, y baja al agua que viene de Fuentes Carboneras que va por el medio del valle hasta el arroyo de Hesillas... (siguen los términos) hasta el agua que viene por medio valle de Ayuela."

El contexto en que se sitúa la leyenda nos encontramos con el avance militar en paralelo a un proceso de repoblación. Mientras las tropas cristianas avanzan hacia el sur recuperando los antiguos territorios, en el norte de Europa (Holanda) en el s. XII surge un movimiento protagonizado por mujeres que, emancipandose de los varones, y no simpatizando mucho con las órdenes religiosas al uso, se retiran a vivir en comunidad ayudando a sus semejantes con independencia de los hombres. Serán denominadas "beguinas" (el movimiento ha continuado hasta el siglo pasado). Su influencia llegó a España (probablemente por la influencia de los movimientos de peregrinación a Santiago) dos siglos después (quizás antes). En España fueron denominadas "beatas". Se trató de un movimiento feminista sorprendente que ilumina favorablemente la "oscura Edad Media".

He aquí una hipótesis sobre cómo me imagino yo esa leyenda que he oído contar muchas veces a mis ancestros y que circula de boca en boca en los tres pueblos. En la toponimia de la zona encontramos "la encina de las degolladas" junto a lo que parecen restos de alguna edificación (huy ya casi imperceptibles) y el perenne surgir de un manantial "de las degolladas".

Recreamos aquí la leyenda con los materiales que he podido conseguir y mucha ilusión.



Imagen del manantial tomada en 1978

Fotografía tomada en los años 80

El manantial al comienzo del milenio.

La famosa "encina de las degolladas" (ya no es una encina) en 1978.

Fotografía de hace unos 30 años, del árbol junto al manantial.

Restos de cantos en el suelo de alguna antigua edificación o quizá de un colmenar. 

Vista del valle con la encina al fondo en medio de la ladera.


La ermita hace cincuenta años.


Abrevadero aprovechando las aguas del manantial. Foto de hace unos 10 años. 

Depósito construido la década pasada que se surte de las aguas del manantial bajando la ladera. 
En la parte alta se aprecia la ermita de Rabanillo en el otero.

Ilustración de una "beguina" 


Comentarios

  1. Nada más puedo añadir en el apartado de comentarios. Todo lo que podría decir al respecto está dicho en la entrada. Eso sí, espero tus aportaciones y puntos de vista.

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